Posturas y prácticas sexuales tántricas que debes probar

¿Estás listo para explorar una nueva dimensión de tu sexualidad? El Tantra es una práctica milenaria que ha ganado popularidad en Occidente en los últimos años, y por una buena razón. Aunque a menudo se asocia con el sexo, el Tantra es mucho más que eso. Se trata de una filosofía espiritual que busca la unión de la mente, el cuerpo y el espíritu a través de la energía sexual.

Si estás interesado en descubrir los beneficios de las prácticas tántricas, este artículo te ofrece una introducción a algunas posturas y prácticas sexuales tántricas que puedes probar. Desde crear un espacio sagrado hasta la postura yab-yum, estas prácticas pueden ayudarte a conectar con tu pareja de una forma más profunda y significativa, y a experimentar placeres que nunca antes habías imaginado.

1. Crea un espacio sagrado

Antes de comenzar con las prácticas sexuales tántricas, es fundamental crear un espacio sagrado. Esto significa crear un ambiente que fomente la conexión, la intimidad y la relajación, y que permita a tu energía sexual fluir libremente.

Busca un lugar tranquilo y libre de distracciones, donde puedas estar cómodo y relajado. Decora el espacio con elementos que te hagan sentir conectado con tu energía sexual. Puedes usar velas, incienso, cuarzos, flores, símbolos espirituales o cualquier otro objeto que te haga sentir en sintonía con tu cuerpo y tu espíritu.

Asegúrate de que el espacio esté limpio y ordenado. La energía fluye mejor en un espacio limpio y despejado. Si es posible, cubre el suelo con una manta o una esterilla para crear una superficie suave y cómoda. También puedes usar cojines y almohadas para crear un ambiente acogedor y relajado.

Finalmente, crea una atmósfera relajante con música suave o sonidos de la naturaleza. Esto ayudará a crear un ambiente que fomente la conexión y la intimidad. Recuerda que el espacio sagrado es un lugar sagrado, donde puedes conectarte contigo mismo y con tu pareja de una forma más profunda y significativa.

2. Mirar a los ojos (o "mirar al alma")

La práctica de mirar a los ojos, también conocida como "mirar al alma", es una técnica tántrica que te permite conectarte en un nivel más profundo y significativo. Esta práctica consiste en sentarse frente a frente con tu pareja, manteniendo el contacto visual durante un periodo de tiempo prolongado, mientras respiras profundamente y lentamente.

Mirar a los ojos de tu pareja puede ser una experiencia intensa y emocional, ya que te permite ver más allá de las máscaras y las defensas que usamos en nuestra vida diaria. Al mirar a los ojos de tu pareja, puedes ver su verdadero ser, su esencia más profunda, y sentir una conexión más profunda y significativa con ellos.

Para practicar el "mirar al alma", busca un lugar tranquilo y libre de distracciones, donde puedas sentarte cómodamente frente a tu pareja. Luego, cierra los ojos y toma unas respiraciones profundas y lentas, permitiendo que tu cuerpo se relaje y tu mente se calme. Cuando estés listo, abre los ojos y mira directamente a los ojos de la otra persona.

Mantén el contacto visual durante un periodo de tiempo prolongado, respirando profundamente y lentamente. Si te sientes incómodo o emocionalmente abrumado, no te preocupes, esto es normal. Simplemente continúa respirando profundamente y permite que las emociones fluyan a través de ti.

Después de unos minutos, cierra los ojos y toma unas respiraciones profundas y lentas, permitiendo que la experiencia se asiente en tu cuerpo y tu mente. Luego, comparte cómo te sentiste durante la práctica y qué emociones o pensamientos surgieron para ti.

La práctica del "mirar al alma" tiene muchos beneficios, incluyendo una mayor intimidad y conexión emocional con tu pareja, una mayor autoconciencia y aceptación de ti mismo, y una mayor capacidad para estar presente y disfrutar del momento.

Si estás buscando una forma de profundizar tu conexión con tu pareja y experimentar una mayor intimidad y placer en tu vida sexual, la práctica del "mirar al alma" es una técnica tántrica que vale la pena probar.

3. Circuito manos en corazones

La práctica del circuito manos en corazones es una técnica tántrica que te permite conectarte con tu pareja en un nivel más profundo y significativo. Esta práctica consiste en sentarse frente a frente con tu pareja, manteniendo el contacto físico entre las manos y los corazones durante un periodo de tiempo prolongado, mientras respiras profundamente y lentamente.

Esta práctica es una forma de abrir tu corazón y permitir que la energía fluya libremente entre tú y el otro. Al mantener el contacto físico entre las manos y los corazones, estás creando un circuito energético que te permite conectarte con tu pareja en un nivel más profundo y significativo.

Posturas y prácticas sexuales tántricas que debes probar

Para practicar el circuito manos en corazones, busca un lugar tranquilo y libre de distracciones, donde puedas sentarte cómodamente y compartir el espacio. Luego, coloca tus manos sobre el corazón de tu pareja y pídele que haga lo mismo contigo. Cierra los ojos y toma unas respiraciones profundas y lentas, permitiendo que tu cuerpo se relaje y tu mente se calme.

Mantén el contacto físico entre las manos y los corazones durante un periodo de tiempo prolongado, respirando profundamente y lentamente. Si te sientes incómodo o emocionalmente abrumado, no te preocupes, esto es normal. Simplemente continúa respirando profundamente y permite que las emociones fluyan a través de ti.

Después de unos minutos, cierra los ojos y toma unas respiraciones profundas y lentas, permitiendo que la experiencia se asiente en tu cuerpo y tu mente. Luego, comparte cómo te sentiste durante la práctica y qué emociones o pensamientos surgieron para ti.

La práctica del circuito manos en corazones tiene muchos beneficios, incluyendo una mayor intimidad y conexión emocional, una mayor autoconciencia y aceptación de ti mismo, y una mayor capacidad para estar presente y disfrutar del momento. Además, esta práctica puede ayudarte a liberar bloqueos energéticos y emocionales, y a aumentar tu energía vital y tu bienestar general.

Si estás buscando una forma de profundizar tu conexión con tu pareja y experimentar una mayor intimidad y placer en tu vida sexual, la práctica del circuito manos en corazones es una técnica tántrica que vale la pena probar.

4. Masaje tántrico

El masaje tántrico es una práctica milenaria que forma parte de la filosofía tántrica, la cual busca la unión de la mente, el cuerpo y el espíritu a través de la energía sexual. Esta técnica consiste en masajear el cuerpo de forma lenta y sensual, prestando especial atención a las zonas erógenas para despertar la energía sexual y utilizarla para conectar en un nivel más profundo.

Antes de comenzar el masaje, crea un ambiente relajante con velas, incienso y música suave. Pídele a tu pareja que se acueste boca abajo y comienza a masajear su espalda, hombros y cuello con movimientos suaves y envolventes. Utiliza aceites esenciales para hacer el masaje más placentero y estimular los sentidos.

Después de unos minutos, pasa a masajear sus piernas, comenzando por los pies y subiendo lentamente hasta los muslos. Presta especial atención a los puntos de presión y a las zonas más sensibles. Utiliza movimientos circulares y suaves para estimular la circulación sanguínea y liberar la tensión acumulada.

Una vez que hayas masajeado sus piernas, solicita que se dé la vuelta y comienza a masajear el pecho y abdomen. Luego, pasa a masajear sus genitales con movimientos lentos y suaves, prestando atención a sus reacciones y respetando sus límites. Recuerda que el masaje tántrico no se trata solo de llegar al orgasmo, sino de conectar con tu pareja en un nivel más profundo y experimentar placer en cada momento.

El masaje tántrico tiene numerosos beneficios para la salud y el bienestar emocional. Ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, mejora la circulación sanguínea y linfática, y fortalece el sistema inmunológico. Además, fomenta la intimidad y la comunicación, y puede ayudar a superar bloqueos emocionales y sexuales.

Si estás buscando una forma de profundizar tu conexión con tu pareja y experimentar una mayor intimidad y placer en tu vida sexual, el masaje tántrico es una práctica que vale la pena explorar.

5. La postura yab-yum

La postura yab-yum es una de las más sagradas y poderosas en el Tantra. Se trata de una postura en la que la pareja se sienta frente a frente, con las piernas enlazadas y el hombre sobre la mujer. Esta postura permite una conexión profunda y una comunicación no verbal entre los dos, además de estimular la energía sexual.

Para practicar la postura yab-yum, la mujer debe sentarse en el suelo con las piernas extendidas y las rodillas ligeramente dobladas. El hombre se sienta encima de ella, con las piernas enlazadas detrás de la espalda de la mujer. Los dos deben estar lo más cerca posible, con los pechos y los genitales en contacto. La mujer puede rodear la espalda del hombre con los brazos, mientras que él puede sujetar suavemente los hombros de la mujer.

Una vez en la postura, ambos deben respirar profundamente y lentamente, concentrándose en la respiración del otro. Esta respiración sincronizada ayuda a crear una conexión más profunda entre los dos y a estimular la energía sexual. Además, la postura yab-yum permite un contacto visual prolongado, lo que puede aumentar la intimidad y la conexión emocional.

La postura yab-yum también tiene beneficios físicos, como la estimulación de los órganos sexuales y la liberación de endorfinas. Además, puede ayudar a mejorar la postura y la flexibilidad, especialmente en las caderas y las piernas.

Pero más allá de los beneficios físicos, la postura yab-yum tiene un profundo significado emocional y espiritual. Esta postura representa la unión de los opuestos, la fusión del yin y el yang, la unión del masculino y el femenino. Al practicar la postura yab-yum, la pareja puede experimentar una sensación de unidad y conexión más allá de lo físico.

La postura yab-yum también puede ayudar a sanar heridas emocionales y a liberar bloqueos energéticos. Al permitir una conexión profunda y una comunicación no verbal, la pareja puede abrirse el uno al otro de manera más profunda y honesta. Esto puede ayudar a sanar heridas del pasado y a crear una conexión más fuerte y duradera.